El cocodrilo en la mitología generalidades

El cocodrilo era un animal sagrado en una parte de Egipto. Los habitantes de Tebas y del lago Moeris le tributaban un culto particular. Cuando lograban domesticar a uno de estos animales le colgaban en las orejas piedras preciosas y otros adornos de oro y le alimentaban con manjares sagrados. Después de su muerte lo embalsamaban y depositaban en una especie de urna, que conducían al Laberinto donde sepultaban a los reyes. Llegó a tal extremo la superstición de los Ombitas que se alegraban al ver a sus hijos presa de los cocodrilos.

Por otra parte estos mismos animales eran mirados con terror en el resto de Egipto, de modo que mataban a cuantos podían. La religión aumentaba aún el odio natural a un monstruo tan carnívoro. Seth, asesino de Osiris y enemigo de todos los dioses había tomado la forma de cocodrilo. Según Plutarco este animal es el símbolo de la divinidad, porque carece de lengua, en atención a que Dios, sin hablar, imprime en silencio en nuestros corazones, las leyes de la equidad y de la sabiduría. Su jeroglífico era también el símbolo de la tiranía en el gobierno.

Los egipcios creían que los cocodrilos viejos tenían la virtud de la adivinación y que era buen agüero cuando tomaban algo de comer de la mano de alguno y al contrario cuando lo rehusaban. Si se cuentan los dientes del Cocodrilo, dice Aquiles Tacio, se halla que su número iguala a los días del año. Tal vez es por esto que los egipcios representaban la imagen del sol en un barquichuelo que conducía un Cocodrilo. En fin, los egipcios adoradores de los Cocodrilos, decían que durante los siete días consagrados al nacimiento de Apis, olvidaban su ferocidad natural, no causando daño alguno y que al octavo después de medio día, volvían a su ferocidad acostumbrada. También pretendían que los cocodrilos, por respeto a la Diosa Isis, que en otra ocasión se había servido de un barquito construido de la corteza del papiro, no causaban daño alguno a los que navegaban en el Nilo con barquichuelos de esta planta.