Crecimiento humano

Introducción

Se define como crecimiento al aumento irreversible del tamaño en un organismo consecuencia de la proliferación celular que conduce al desarrollo de estructuras más especializadas del mismo. Este aumento comienza por las propias células, pasando por tejidos, hasta llegar a órganos y sistemas. Estas estructuras, más desarrolladas, se hacen cargo de realizar el trabajo biológico más importante.

El crecimiento también se define como el aumento en el número de células de un organismo, lo que conlleva el aumento de tamaño. Es medible y cuantificable. El crecimiento se consigue por una doble acción: un aumento en el tamaño de las células del cuerpo, y un aumento en su número real.

Tanto el crecimiento como la división celular dependen de la capacidad de las mismas para asimilar los nutrientes que encuentran en el ambiente en que se desarrollan. Así, los alimentos son degradados y a partir de la energía que ellos brindan el cuerpo la utiliza para construir nuevas estructuras celulares.

El crecimiento es el proceso mediante el cual los seres vivos aumentan su tamaño y se desarrollan hasta alcanzar la forma y la fisiología propias de su estado de madurez (edad adulta). Crecimiento es, también, el proceso cuantitativo expresado en los valores de las dimensiones corporales.

Crecimiento después del nacimiento

Uno de los cambios más llamativos que tienen lugar durante las primeras fases del crecimiento es el aumento de tamaño del tronco y de las extremidades con respecto a la cabeza.

Este hecho se produce porque casi toda la masa cerebral se ha formado antes del nacimiento. Sin embargo, el cerebro aún tiene que experimentar un proceso de maduración que depende de la tiroxina. El cuerpo también incrementa su tamaño durante unos quince años, en un proceso que se debe en gran parte a la secreción de hormona del crecimiento.

La producción de esta hormona tiene especial importancia en el crecimiento y para el endurecimiento de los huesos, que tiene lugar hasta los 25 años de edad. Además del cerebro hay muchos órganos que continúan madurando después del nacimiento.

Algunos de estos órganos son el hígado, el corazón, los pulmones y el sistema inmunológico, así como el aparato reproductor. En el adulto, ciertos órganos como el hígado y los huesos aún son capaces de crecer si sufren una lesión; los elementos implicados en la formación de la sangre se multiplican durante toda la vida.

Entre las enfermedades relacionadas con el crecimiento se encuentran la acromegalia, el enanismo, el gigantismo y el cretinismo. El crecimiento descontrolado de un tejido inadecuado se denomina cáncer.

Procesos que producen el crecimiento

El crecimiento de los organismos se produce, en general, por medio de diferentes procesos, entre los que están:
El aumento en el número de células del cuerpo.
•La adición de nuevas estructuras en el organismo.
•La renovación del tejido que recubre al cuerpo, como el cambio o muda de piel en las víboras, el de plumaje en las aves o el de pelo en los mamíferos.
•La modificación de estructuras ya existentes (crecimiento del cuerno en un rinoceronte o astas de un venado).

Hormona del crecimiento y otras hormonas

Adrenalina o epinefrina: Se produce en la médula suprarrenal. Está muy ligada a la actividad del sistema nervioso.
•Actúa sobre el aparato circulatorio (acelera el ritmo del corazón y aumenta la presión arterial) y sobre el respiratorio.
•Aldosterona: Se produce también en las glándulas suprarrenales. Aumenta Ia retención general de sodio y agua en el organismo.
•Corticosterona: Se produce en la corteza de las glándulas suprarrenales. Su función es acelerar el metabolismo general, estimulando Ia transformación de carbohidratos en glucosa.
•Estrógeno: Se produce en los ovarios de la mujer. Tiene varias funciones, entre las que se encuentran el funcionamiento cíclico normal de los órganos sexuales femeninos y favorece el desarrollo de las glándulas mamarias y de las características femeninas generales.
•Hormona adrenocorticotrópica u hormona adrenocorticotrófica o adrenocorticotropina o adrenocorticotrofina: Se produce en la hipófisis.
•Hormona del crecimiento o somatotropina o somatotrofina: Se produce en la hipófisis. Controla el desarrollo corporal y el crecimiento de los huesos.
•Hormona folículo-estimulante u hormona estimulante del folículo: Se produce en la hipófisis. En los ovarios de la mujer estimula la ovulación y la producción de la hormona femenina llamada estrógeno.
•Hormona luteinizante: Se produce en la hipófisis. Su función consiste en lograr que los ovarios produzcan la hormona progesterona, y en el varón impulsa que los testículos produzcan Ia hormona llamada testosterona.
•Hormona paratiroidea o parathormona: Se produce en la paratiroides. Su función es mantener en la sangre las concentraciones normales de calcio y fósforo.
•Hormona tirotrópica u hormona tirotrófica o tirotrofina o tirotropina: Se produce en Ia hipófisis. Su función es estimular la producción de la hormona tiroidea en la glándula tiroides.
•Hormona tiroidea: Se conoce también como tiroxina. Se produce en la glándula tiroides y su función es acelerar el metabolismo nutritivo.
•Insulina: Es producida por el páncreas. Su función consiste en mantener la concentración normal de la glucosa en la sangre, pues regula el metabolismo de los carbohidratos.
•Noradrenalina o norepinefrina: También se produce en las glándulas suprarrenales. Está muy ligada a la actividad del sistema nervioso.
•Oxitocina: Se produce en la hipófisis. Es la hormona que marca el final de la gestación, provocando contracciones uterinas en el parto. También estimula la contracción de la glándula mamaria para la salida de la leche.
•Progesterona: Se produce en los ovarios y ayuda a la preparación y sostenimiento del útero durante el embarazo.
•Testosterona: Se produce en los testículos; es la encargada de activar y mantener los caracteres sexuales externos masculinos.
•Vasopresina: Se produce esta hormona en la hipófisis. Esta hormona aumenta la tensión en las arteriolas y la retención de agua en los riñones.

Crecimiento fetal

Algunas de las etapas más sorprendentes del crecimiento tienen lugar antes del nacimiento, ya que el ser humano se desarrolla a partir de una sola célula no diferenciada que da lugar a un organismo complejo.

Por ejemplo, durante la última mitad de la gestación el feto aumenta su peso desde los 45 g hasta tres kilos y medio.

Durante este periodo de tiempo, el crecimiento fetal depende de dos hormonas: insulina y tiroxina.

Se ha demostrado que los hijos de mujeres que beben grandes cantidades de alcohol o que fuman durante el embarazo sufren retraso en el crecimiento.